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Encuentro constitucional aborda la perspectiva de los pueblos indígenas de cara a nuevo proceso constituyente

El Centro de Derechos Humanos de la Facultad de Gobierno de la Universidad de Chile se encuentra desarrollando una serie de encuentros de reflexión y debate sobre diferentes contenidos constitucionales ad-portas del inicio de un nuevo proceso constituyente. En estos seminarios, en formato híbrido, se están abordando temáticas como los pueblos originarios, género, personas en situación de vulnerabilidad en el orden constitucional, entre otros.

“¿Qué pasó y en qué estamos? Derechos Humanos y Nueva Constitución” es el nombre del ciclo de debate y reflexión sobre contenidos constitucionales, organizado por el Centro de Derechos Humanos de la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile (CDH) y que busca abordar aquellas temáticas que fueron más conflictivas en el desarrollo del anterior proceso constituyente que culminó el pasado 4 de septiembre con el rechazo de la propuesta constitucional. Este ciclo busca, además, compartir visiones y poner en perspectiva contenidos relacionados a los derechos humanos como género, pueblos originarios, entre otros, de cara al pronto inicio de un nuevo proceso constituyente.

La primera sesión del ciclo, que se llevó a cabo el pasado 28 de noviembre, buscó recoger las diversas impresiones de un panel compuesto por distintos representantes de pueblos originarios. En la cita, participaron el consejero del Instituto Nacional de Derechos Humanos Juan Carlos Cayo (aymara), la secretaria nacional indígena del PPD Paola Catricura (mapuche), la consejera de CONADI Marianela Jopia (diaguita), el presidente de la corporación ENAMA Hugo Alcamán (mapuche) y el director ejecutivo de la fundación Rakizuam Richard Caifal (mapuche). El encuentro fue moderado por el académico de la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile e investigador del CDH Salvador Millaleo.

El impacto del rechazo en las demandas indígenas

El panel compartió sus reflexiones respecto del resultado del plebiscito del 4 de septiembre y su impacto en las demandas indígenas.

Una de las lecturas se centró en la conjunción entre la falta de valoración que existe sobre los pueblos indígenas; el desconocimiento sobre algunos conceptos constitucionales vinculados a los pueblos originarios y la desconexión de algunos de estos contenidos con los problemas cotidianos de las personas que los integran. En esta línea, se destacó como un factor -especialmente preocupante- el desarrollo de campañas de desinformación y la instrumentalización de algunas de las demandas de los pueblos indígenas para promover el rechazo.

“A través de una campaña de desinformación y de miedo se dijo que el país se dividiría tras declararse Estado Plurinacional, y que al otorgar el reconocimiento a los pueblos originarios los indígenas tendrían más derechos que el resto de la población […] Según mi apreciación personal esto provocó que las personas indígenas rechazaran la propuesta por no sentirse a su vez más rechazados por una sociedad racista que los catalogaría ahora como privilegiados”, expresó Paola Catricura.

En la misma línea, Juan Carlos Cayo señaló: “para el chileno o la chilena no indígena quedó la sensación de que somos un grupo de privilegiados que tenemos miles de millones de hectáreas, miles de millones de litros por segundo y que le queremos robar la tierra a los chilenos. Y eso es mentira, eso no es así. Entonces hacia afuera hay que hacer un trabajo profundo de comunicación, de educación”.

En una posición distinta, Hugo Alcamán expresó reconocerse como uno de los rostros y responsables del rechazo. En una definición que describió como sumamente difícil, centró su crítica en el efecto de la nueva constitución en las personas no indígenas. Al respecto señaló que ésta “pasaba a llevar los derechos de la gran mayoría de chilenos y eso nos iba a confrontar más de lo que ya estamos”.

EL Concepto plurinacionalidad

Además de referirse al resultado mismo del proceso, los exponentes expusieron, también, su evaluación respecto del contenido de la propuesta de la Convención Constitucional, compartiendo apreciaciones divergentes sobre los derechos en ella consagrados, por ejemplo, en conceptos como la plurinacionalidad.

Sobre los derechos de los pueblos indígenas, Juan Carlos Cayo expresó: “Nuestra intención fue tomar todo el arco de derechos que existen en los tratados internacionales y en el sistema internacional de protección de los derechos humanos y en el fondo, constitucionalizarlos. Esa fue la intensión, intentar regular de la mejor manera posible e inclusive en algunos puntos rebajando el estándar que la misma ley chilena tiene”.

Apoyando esta evaluación, Paola Catricura señaló que “de alguna manera el texto si recogió en esencia las demandas del movimiento indígena y en eso los convencionales fueron exitosos, no solo en materia de derechos indígenas, sino que también en Estado social, en materia de calidad, de medio ambiente”. La expositora señaló, sin embargo, que uno de los déficits se vinculó a la falta de tiempo para pulir y revisar la propuesta, amplificando el diálogo social.

Por su parte, Hugo Alcamán situó su crítica no en el contenido de los derechos, sino en un exceso de la Convención Constitucional a la hora de regular su ámbito de aplicación. “Poniendo la paz como bien superior, sencillamente tuvimos que votar rechazo. Pero no porque rechazáramos nuestros legítimos derechos, sino porque esta propuesta de constitución a nuestro juicio se saltó el artículo 4 de la declaración de los derechos indígenas de las naciones unidas, que [indica que] tenían que ser dentro de nuestro ámbito de acción”. Desde esta perspectiva, calificó el resultado del proceso como una “renuncia temporal” en materia de reconocimiento de estos derechos.

El Pluralismo Jurídico

Abordando la demanda por la constitucionalización del pluralismo jurídico Richard Caifal expresó que conceptos como “sistemas de justicia” no correspondían a la realidad de los pueblos, cuestión rebatida por los demás exponentes. También se mostró crítico respecto del reconocimiento de la plurinacionalidad, señalando que, en caso de desarrollarse un nuevo proceso, “la plurinacionalidad no tiene ningún tipo de cabida”, agregando que “la manera en que ha sido evaluado por la ciudadanía hace poco viable abordarla”. Se mostró contrario, además, de la regulación de la consulta indígena contenido en la propuesta rechazada, señalando que “daba lugar a variadas interpretaciones incluso llegando a constituirse hasta en un veto cuestión que creo puede ser excluida del próximo debate”.

Rebatiendo la crítica a la plurinacionalidad, Marianela Jopia, señaló que el problema radicaba en la errónea comprensión del concepto por parte de la ciudadanía: “Las personas asocian el concepto de nación con país. Todavía no disocian ambos conceptos, creen que significan lo mismo. Entonces, nuevamente la tarea que tenemos que hacer es informar, pero informar desde la realidad. Que se reconozcan 11 naciones indígenas no significa que el país se descalibre en 17 mil pedacitos. Lo que significa es que se les reconocen sus derechos culturales, sociales, económicos, de cosmovisión y humanos dentro del territorio”.

Perspectivas para un nuevo proceso

En el debate los expositores expresaron cuáles serían los contenidos a debatir de abrirse un nuevo proceso constituyente y los pisos mínimos en materia de derechos de los pueblos indígenas que allí debiesen estar.

Una idea compartida es que un nuevo proceso debería considerar la participación de los pueblos. “El nuevo órgano constituyente debe ser de elección democrática, yo creo que eso debe ser un intransable y representativo de la diversidad del país. Por tanto, es necesario una integración de escaños reservados para los pueblos indígenas que permita la discusión y los acuerdos en conjunto con la sociedad chilena representada en ese órgano, lo cual enriquece y da una mayor legitimidad a las instituciones”, señaló Paola Catricura.

Complementando esta visión, Marianela Jopia enfatizó en la necesidad de dar representación a todos los pueblos, considerando la diversidad que existe entre ellos además del criterio demográfico. “Ser mayoría en cantidad no significa representar a la totalidad de los pueblos. Entonces, a lo primero que deberíamos aspirar es que cada pueblo este representado en ese espacio, con su diversidad, diversidad territorial, diversidad de cosmovisión, diversidad de cultura”, indicó.

En una línea similar se expresó Richard Caifal, señalando sobre la representación: “Creo que eso sería un elemento que debe estar presente si o si en la discusión de esta futura carta fundamental, porque de lo contrario como vamos a hacer una incidencia real en la toma de decisiones”.

Al abordar el contenido de una nueva constitución, hubo acuerdo en que el piso mínimo debe considerar los derechos contenidos en la Declaración de los Derechos Humanos de los Pueblos indígenas de Naciones Unidas. Otro tema respaldado mayoritariamente fue la necesidad de reconocimiento de los pueblos a nivel constitucional, indicando que este debe ser “no de etnias, no de grupos, no de comunidades, sino de pueblos indígenas como comunidades políticas diferenciadas, sujetos titulares de derechos colectivos, entre ellos la libre determinación de las propias prioridades de desarrollo en conjunto con la sociedad chilena y no fuera de ella o fuera del Estado”, en palabras de Paola Catricura.

El encuentro finalizó compartiendo evaluaciones respecto de la actual institucionalidad en materia indígena, en las que se resaltaron defectos como la falta de participación de los pueblos, la visión estereotipada que se tiene de ellos, la falta de la incorporación de un enfoque de interculturalidad en las políticas públicas, entre otros problemas. Dichos desafíos hacen necesario avanzar en el diálogo y la búsqueda de puntos comunes entre los pueblos para continuar avanzando en dichas problemáticas desde una visión de Estado.

El registro completo del encuentro está disponible en el siguiente enlace: https://www.youtube.com/watch?v=PbyKqnMmYiM&t=5321s&ab_channel=uchilederecho

El Centro de Derechos Humanos continuará realizando estas actividades durante todo el mes de diciembre y enero. El próximo debate tendrá lugar el día 19 de diciembre, y abordará las perspectivas de ciertos grupos en situación de vulnerabilidad. Para mayor información puedes visitar las redes sociales del CDH. 

Por Prensa CDH

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