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Inap presenta documento con principios y propuestas constitucionales en materias de descentralización

El Centro de Análisis de Políticas Públicas de la Universidad de Chile dio a conocer un informe que plantea los principios que deberían quedar instaurados en la Constitución en materias de descentralización. Su director, Sergio Galilea, afirma que es la oportunidad para dar un paso decisivo en desconcentrar el poder central

La Universidad de Chile, desde sus orígenes, ha sido un fuerte impulsor de generar políticas en torno a la descentralización del poder, con el fin de darle mayor autonomía de gestión a las regiones. Ha sido una tarea con historia y de la cual se tienen registros de la época de Valentín Letelier cuando fuera rector de la Casa de Bello en 1906, apunta el director del Centro de Análisis de Políticas Públicas de la Universidad de Chile, Sergio Galilea. Y en ese marco, la universidad no podía quedar ajena a esta importante materia en medio del naciente debate por una nueva Constitución

Y para contribuir al respecto, el Instituto de Asuntos Públicos (INAP) elaboró un documento con propuestas concretas y con los principios que deberían quedar plasmados en el nuevo texto constitucional. El texto parte de un diagnóstico concreto: los avances en materia de descentralización han sido mínimos.  Galilea explica que este escenario constitucional debe impulsar un salto cualitativo para concretar una efectiva política de descentralización.

“Se debe dar un paso decisivo y abierto que consagre un fortalecimiento real de los gobiernos regionales. Hoy, eso está absolutamente disminuido, porque no hay una política de gobiernos regionales, existiendo una desconexión con el gobierno central. Esto no significa cambiar de sistema, se pude seguir con un Estado unitario, pero descentralizado. Y eso se logra estableciendo algunos principios en la Constitución, para que después se puedan llevar a cabo —en forma concreta — por medio de un nuevo sistema de leyes”, comenta.  

En esa línea, el documento establece cómo debiese quedar establecido el principio de descentralización en la nueva Carta Magna:

“El Estado de Chile es unitario y descentralizado, su territorio se divide en regiones y en él coexisten el Gobierno Central con los Gobiernos Regionales y los Gobiernos Municipales, con sus respectivas competencias y consiguiente financiamiento, en conformidad con la ley”.

El documento agrega: “Esta sola frase constitucional implica un “cambio esencial” a lo actual. Reconoce la coexistencia de tres niveles de gobierno (no de mera administración). Por otra parte, mandata a la ley para que defina las competencias fundamentales de cada instancia de Gobierno y sus respectivos financiamientos. Las mismas disposiciones legales debieran establecer competencias compartidas entre algunos de esos niveles de Gobierno, como debe ocurrir en materias de ordenamiento territorial entre Gobiernos Regionales y Municipalidades”.

Cuando en 1990 se crean por Ley los gobiernos regionales, y luego en 1992 se establece la elección popular de alcaldes, comienza un lento proceso de políticas que se orientan a generar condiciones para una descentralización. Una serie de cambios a las que se sumaron, este 2021, la elección directa de gobernadores regionales. Sin embargo, según el análisis del informe del INAP, todos estos avances han sido paulatinos y vacilantes. Incluso, hoy, con la nueva figura de gobernador regional, aún no se tiene del todo claro cuáles serán efectivamente sus funciones y atribuciones. Ni siquiera tienen una oficina asignada.

Con todo, la propuesta del documento establece —más allá de los principios constitucionales— una bajada práctica que permita un avance sustancial a las leyes aprobadas en los 90: “Es posible avanzar en afianzar las competencias principales que estableció la Ley Regional de 1992 para los Gobiernos Regionales, con el énfasis en”:  

  • Definir la totalidad de la inversión pública en el territorio.
  • Establecer o sancionar los instrumentos de ordenamiento territorial (en conjunto con los respectivos Municipios).
  • Certificar ambientalmente los proyectos públicos y privados significativos
  • Dirigir y gestionar en el territorio los instrumentos de fomento y emprendimiento productivo.

Galilea complementa que es fundamental establecer competencias específicas que deben quedar establecidas por Ley, para incorporar nuevas facultades, tanto a los gobiernos regionales como a las municipalidades, para que efectivamente actúen como gobiernos y no solo como administradores.

Nuevo Magíster en Gestión y Desarrollo Local y Regional

En la búsqueda por generar nuevas instancias de conocimiento en torno a las materias de descentralización, este año el INAP lanza la primera versión del Magíster en Gestión y Desarrollo Regional y Local (MAGDEL), que busca brindar un enfoque profesional, con un carácter multidisciplinario a estas materias. Este posgrado pretende otorgar herramientas concretas para el accionar de los gobiernos regionales y los municipios, y para elaborar un conjunto de competencias de gestión y de conocimiento en torno al desarrollo territorial y local. Las postulaciones aún están abiertas durante el mes de julio, y se puede consultar sobre el detalle del programa en el siguiente link : http://www.inap.uchile.cl/magdel

Sergio Galilea es Director del Centro de Análisis de Políticas Públicas de la Universidad de Chile

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